Grafemas

Boletín de la AILCFH

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Creación: Lidia Díaz, University of Texas- Brownsville
Publicado en Grafemas diciembre 2007

Poemas selectos

Lidia Díaz nació en Buenos Aires, Argentina. Tiene una licenciatura en Ciencias de la Educación de la Universidad Nacional de Córdoba, Argentina, y un doctorado en Literatura Hispanoamericana de la Universidad de Pittsburgh, PA.  A partir de un trabajo de investigación sobre “La Edad de Oro”, de José Martí, durante sus años de estudiante del doctorado comenzó a trabajar en literatura infantil, logrando hacer confluir su formación pedagógica y literaria. Este trabajo fue publicado en 1992 en la Revista del Ministerio de Educación de Cuba, y también premiado con la Beca Mellon. Desde hace 11 años es profesora en el Departamento de Lenguas Modernas de la Universidad de Texas en Brownsville, donde diseñó e implementó uno de los pocos cursos de literatura infantil que existen en los programas de español de EE.UU. 

Ha presentado trabajos sobre literatura infantil escrita en español en numerosos congresos y reuniones profesionales regionales, nacionales e internacionales, y ha publicado artículos en revistas y publicaciones especializadas. Hace un año comenzó a escribir poesía y ha publicado sus trabajos en antologías regionales e internacionales. Ha ganado el segundo Premio Poesía al Mar (Tamaulipas, Mex.), el Premio de Poesía en el XVII Certamen de Poesía y Narrativa Breve (Buenos aires, Argentina) y el primer premio del certamen de poesía organizado por el Ateneo Literario José Arrese, de Matamoros (Tamps., Mex).

Hoy lo digo en voz alta
A todas las mujeres víctimas de maltratos

Hoy no va a ser igual que ayer.
Algo en mis adentros se inquieta
con la premonición de las vísperas.
Algo que hoy puja distinto
desde mis huesos
para no desmayarse
en el grito ahogado de tantas veces.
¿Por qué hoy,
si el miedo es el mismo
y las ventanas siguen cerradas?
¿Por qué ahora,
si ninguna cuña nueva
atina a forzar los cerrojos de la rutina?
¿Dónde están los indicios de este coraje joven
que me lleva ahora ante el espejo
para tratar de encontrarme otra
con el mismo pánico ritual de mis búsquedas de antes?
Nada…
Hoy todo parece igual que ayer.
Pero esta vez no.
Esta vez voy a ser fiel a mí.
Hoy quiero quererme
para fraguar las ganas
que no se atrevieron antes
a consagrarme heroína de mi propia novela.
Hoy voy a descoser la mordaza milenaria
para que mi  vigilia subversiva
intercepte las máscaras.
Me voy a reinventar…
y a pesar de los recuerdos atropellados
que hacen un último intento
por bloquearme la salida,
voy a enterrar las prótesis
que desde siempre
oficializaron las farsas.
Hoy me voy a volver loca de mí
y mi voz traducirá mi monólogo eterno
en voluntad de vivir.
Hoy ya no callo más.
Hoy no huyo más.
Hoy mis cartas-a-nadie
llegarán al puerto de mis barcos
definiendo un nuevo espacio
que me resignifique.
Me embriaga imaginarme yo,
percibirme con una mirada a mí que inauguro;
me regalo entonces un réquiem visceral
por las noches de tristeza disfrazada
que gemí en sordina
y que hoy reaprenden el clímax
de una autoconciencia
que me hace aun más mujer.
Hoy voy a juntar mis pedazos
para rehacerme en un gesto creacionista
que hambriento va abortando mis vacíos.
Hoy renazco yo pero sujeto.
Sujeto de mi cuerpo para desnudarme cuando yo quiera
clausurando para siempre las puertas de un dolor
que ya es historia.
Sujeto de mi propia palabra para decir basta.
Porque hoy lo digo en voz alta…

 

La solterona

Me dijeron que lo que tengo es soledad.
Quizá por eso es que me visto de apariencias
y me calzo de sonrisas
disfrazando los harapos de mi día
para adornarme de cáscaras.
Me dijeron que hay fantasmas en mis noches.
Quizá por eso es que encendiendo antorchas
convenzo a mi lecho
de los soles falsos de prisa y consuelo.
Me dijeron que en mi casa no hay amores.
Quizá por eso es que los ecos que me habitan
se nutren de vacío
fabricando sueños
para ahuyentar el frío.
Me dijeron que no puedo ser feliz.
Quizá por eso es que me miro ahora
y me pregunto y me cuestiono
y me dibujo y reflexiono
y me doy cuenta de los cielos fabricados,
de caminos prefijados
y de vidas delineadas
en los mandamientos del deber ser.
Hombre necio, no condenes mi antihistoria
no me importa el qué dirán.
Ya no acepto que me diagnostiquen
con el mal de las ausencias
porque a contramano del itinerario
programé mi ruta
decidí mis horas
destiné vigilias.
Y reniego del estigma añejo
que invalida mi palabra libre
porque yo sin novio
porque yo sin nexos
porque yo soltera
puedo merecerme
quiero defenderme
voy a festejarme
aunque duden de mis garras
para ser feliz.

 

Otra Historia

Vení,
sentate y escuchame.
Hoy es el día
ésta es la hora
aquí es el lugar.
Voy a ahuecarte en mi cuento,
inmemorial habitante
de edenes inventados.
¿Cómo fue que te escribiste?
¿Quién te convenció de tu cetro?
¿Qué lectura validó tu reino?
Prestá atención, 
salite de vos y oí el clamor
de nuestras voces que hoy
se nacen y responden,
se niegan y resisten.
No cierres las ventanas, 
el grito las ignora.
No vuelvas la cabeza,
el sol nos reivindica.
No esquives a la vida,
te condenarás a huírle.
Te creíste la leyenda
de idílicos verdores
que arcaicos agonizan
tu dominio de cartón.
No me amputes más
No me ignores más
No me esculpas más.
Se cenizan ya tus leños
y el poder se te marchita.
¿Te asombra acaso
mi corazón en armas?
Por los siglos de los siglos
bebí el cáliz del patriarca;
subyugado maniquí
me atrincheré a esperarte
y desde el margen comencé a entender
y maduré mis puños
y sepulté el lamento
y entonces…
insolente fénix de mi propia vida
levanté la cabeza y decidí
que hoy es el día,
que ésta es la hora
y que aquí es el lugar
para que me escuches,
porque hoy ves aquí a otra mujer
y porque ahora ésta es otra Historia.

 

Verseando

Salieron de mis cofres
con la descarada audacia
del estreno.
Ignoraron los caminos sorteando cauces,
asombraron sus destinos sin esperar
la señal del visto bueno,
y rebeldes se me fueron agolpando
en la garganta
hasta que no pude más y la dejé partir.
Mis palabras….
Esas locas que no me hacen caso
y en espiral copulan casquivanas
desvirgando la hoja en blanco.
Sentí ganas de respirar la letra,
de abrirme ávida al latido quijotesco
del poema
y heme aquí… verseando…
Cabalgué así en los soles
de inéditos trayectos,
danzando en la osadía de la imagen
y viajando por los mares de las búsquedas
para encontrar mi voz en la metáfora.
La luna ya no es luna
el viento ya no es viento
el tiempo ya no es tiempo;
¿qué extraña dimensión los viste ahora
que sus ropas ya perdieron la inocencia?
¿qué temblor inédito los resucita
si juegan a esconderse de la rima?

Mis palabras…
Irrumpen poderosas para marearme
en su guiño lírico
y quiebro así el orden del discurso
sin querer queriendo. 
Iniciándose, ingenuas,
se piensan autónomas del abrazo mío
y libres del acecho de mi risa y de mi llanto.
Pero mis cielos las llueven y mis pasos las andan,
mis ojos las raptan y las funden mis fuegos
desde mis entrañas tan apalabradas.
Hoy estoy de nupcias con la letra niña
que inaugura en mí esta magia nueva
que me sueña plena
para celebrar mis alas.
Por eso… heme aquí...
verseando.

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